miércoles, 30 de marzo de 2011
Ayúdame Freud !
El vive conmigo en mi inconsciente, el es dueño de mi pasado y mi presente, su morada es mi falta de inseguridad y su comida mi ansiedad, ayúdame Freud; el pisa cada uno de mis pasos, bebe el vino junto a mi y del mismo vaso, el es el hombre perfecto que me construyó mamá y esta jodiendo mi psicología, ayúdame Freud. Será doctor que el chaleco de fuerza aún sigue atando mi cordura?, que mis complejos aún no razgan su costura?, o será que el hombre perfecto que me construyó mamá es de muy grande estatura?. Será doctor que pido mucho, o me conformo con poco?, que sigo cuerda o estoy totalmente loca?, o será que la vida no es otra cosa que un racimo de antojos?. Y él que paga los platos rotos siempre es él, él de a deveras, él que me cuida, el que me entibia en mis noches de tanto frío; el que me espera, el que me aguanta, el enemigo del fantasma en mi cabeza. Me lo construyeron puritano e inteligente, bueno para la cocina y muy decente, tan irreal que existiria en mi mente y nada más, pero insisto en compararlo con él. Será doctor que esto me pasa sólo a mi? o a todo el mundo?, y el doctor me contestó: 'no hay nadie que se salve de este asunto'.
sábado, 26 de marzo de 2011
Me dejaste el mundo de cabeza y un grito en el contestador
que anunciaba con toda certeza que esta vez se te acabo el amor,
me dejaste un 'pero' y un 'porqué', unos cuantos insultos y un adiós,
una duda flotando en mi cabeza, y la promesa de no volver jamás,
lo que siento lo guardo en la nevera, por si un dia decides regresar.
martes, 22 de marzo de 2011
miércoles, 16 de marzo de 2011
Yo pensaba que de él me habia olvidado, y acá me vez búscandolo una vez más; mi carcelero, mi perpetua condena, mi debilidad, ave nocturna trás su vuelo deja tanta soledad. Aprendí a odiarlo con el tiempo, y me sentí mucho mejor! Sin emabargo uno siempre añorará al que le rompe el corazón. Ahora vuelve a seducirme cuando no lo espero, falsas promesas me ha vendido una vez más. Bla, bla, bla.
jueves, 10 de marzo de 2011
Acudí a tu auxilio de forma inmediata, 'hola, ¿que tal?', tú sonrisa y perdi por goleada, te apoderaste al instante de mi ocio, y al fin y al cabo pude entender que hiciste negocio.
Una ráfaga de balas seductoras no lograban vulnerar una coraza idiota; y con mi seguridad ya en la miseria, fuimos por un café, juntos los tres: vos, yo y tú histeria.
miércoles, 9 de marzo de 2011
martes, 8 de marzo de 2011
miércoles, 2 de marzo de 2011
Suscribirse a:
Entradas (Atom)